"En la lucha contra la realidad, el hombre tiene solo un arma: la imaginación."

Capitulo 1- Una carta sin enviar



Querido Sobrino:
"Estamos a 16 de Diciembre. Son las 5 de la mañana, soy Junli y soy  vigilante nocturno, o eso te he dicho siempre, en realidad soy  un Cazador, supongo que no tienes ni idea de que va esto ¿verdad? Mira, los Cazadores somos una élite de agentes que nos paseamos por ahí y por allá en busca de demonios, si demonios. Tu eres mi sobrino, y por eso también tienes sangre de Cazador. Y te preguntaras, que porqué te lo cuento, bueno es posible que mañana sea mi último mañana y me gustaría que lo supieras, y a ser posible que siguieras mi misión, también porque siempre he deseado que lo supieras y vieras e hicieras lo que yo puedo ver y hacer.


Bueno, esto empieza el día que me echaron de la agencia C.M. Cazadores de Males. Hasta hace no mucho trabajaba solo, pero hace dos meses una nueva agencia contactó conmigo. De la cúspide he llegado a lo más bajo, y es que como me dijo Dertoy "Cuanto más alto subas, más dura será la caída" Por supuesto, sé que esto no lo dijo él pero si necesitas un consejo, el sabe dártelos. Ya me avisó hace un par de semanas de que al jefe no le había gustado que hubiese hurgado en sus asuntos, pero soy así, donde haya algo podrido, ahí estaré yo. 


Me echó y entré en A.D.M. Asesinos Del Mal. Mi primera misión fue acabar con un nido de demonios, que tenían de tapadera una pizzería, fue bastante fácil, solo tuve que hacer como que entraba a pedir una pizza justo antes de que cerraban para que no hubiese testigos, por lo demás solo tuve que usar mis poderes de... persuasión. Ahora, yo soy el jefe y pienso acabar con J.S. ,el jefe de C.M." 


- Mierda- dice Junli, mi tío, cuando escucha un ruido. Mirando a los lados, vuelve a la carta y escribiendo de forma más embarullada, explica.


"Vienen a por mi, me hubiese gustado darte consejos, enseñarte tus poderes, y técnicas de lucha, pero no puedo, es una pena, tu padre me obligó a jurar que no te hablaría te este mundo que sería él, pero, por desgracia, está muerto. 
                                                                                                                                          Junli"




Se escuchó un golpe en la puerta y una voz que decía


-Junli, quedas detenido en nombre de la C.M. 

Recogió todos los papeles que había por la mesa, una bolsa de deporte y la llaves del coche. Un viejo Bentley negro, le esperaba abajo.


 Dos hombres vestidos con gabardinas negras lo flanqueaban, justo cuando saltaba, la puerta saltaba de sus goznes. Cayó encima de uno de los señores de negro, y a el otro le tiro la bolsa de deporte, que le dio de lleno en la cabeza, arrancó el coche con un fuerte ruido, y salió disparado hacia la carretera.